La Gerencia Estratégica se basa en la fomulación, implementación, evaluación de decisiones y acciones que permiten a una empresa lograr sus objetivos. Sin importar el tamaño del negocio,  toda empresa debe realizar los pasos mencionados si desea ser altamente competitivo y alcanzar los objetivos que se plantee.

El establecimiento de una estrategia permite plantear objetivos y los cursos de acción para alcanzarlos. Sin una estrategia no existe una dirección a seguir coherente que produzca los resultados que se desean.

Por esta razón presentamos algunos beneficios de la Gerencia Estratégica:

  • Permite que una empresa desarrolle la capacidad de influir en su medio en vez de sólo verse afectado por él.
  • Genera una base objetiva para la asignación de recursos y la reducción de conflictos internos en caso de que puedan surgir.
  • Permite el aprovechamiento de las oportunidades del entorno y la minimización de las amenzas externas.
  • Aumenta la rentablidad y el éxito en las empresas.
  • Permite una mayor productividad de los empleados y una menor resistencia al cambio al tener una visión clara de las relaciones desempeño-recompensa.