El mundo empresarial en el que vivimos es cada vez más competitivo y cambiante, por lo que exige que las organizaciones cuenten con gerentes de primer nivel.

El director de RRHH debe de ser como un “socio del negocio”, tener conocimiento suficiente de las herramientas y políticas de recursos humanos, credibilidad personal y ser agente de cambio, porque tiene que convencer de cosas que a veces son difíciles de entender. Ha de poseer visión estratégica, posicionándose en anticipar el futuro y en considerar lo valioso; sentirse seguro de su papel y del valor que aporta (autoconfianza); mostrarse sereno, y ha de influir desde la autoridad moral (credibilidad, impacto e influencia). Hoy en día no se concibe un buen director de RRHH que no sea valiente, optimista y sobre todo un gran comunicador.

Las siguientes son las 8 “competencias críticas” que debe tener todo gerente general de RR.HH. exitoso:

1. Visión, enfoque estratégico y un conocimiento muy claro del negocio.
Deben ser muy conscientes de su contribución para el logro de los objetivos de las organizaciones para las que trabajan. Con interés real en las personas pero con un claro foco en los resultados.

2. Desarrollo del talento.
Su gestión debe estar orientada a captar, desarrollar y retener el mejor talento posible en las organizaciones, de cara a un ambiente cada vez más competitivo, no sólo local sino también internacional. Existe ya una lucha por el talento y esta se irá agudizando con el tiempo.

3. Gestión del conocimiento.
Se requiere contar con personal cada vez más capacitado para enfrentar los cambios y nuevas demandas del mercado, por ello las áreas de RRHH deberán desarrollar planes de capacitación muy efectivos, debiendo estar en capacidad de demostrar el retorno de estas inversiones.

4. La diversidad.
De género, social, cultural, generacional, racial, entre otros; son aspectos con los que las organizaciones tienen que lidiar con mucha frecuencia y el reto está en saber cómo crear el ambiente adecuado de inclusión para todos.

5. Gestión del cambio.
Deben ser capaces de incorporar el cambio como un valor importante en las organizaciones para enfrentar de mejor manera un mercado y un mundo cada vez más cambiante.

6. Liderazgo.
Debe ser un líder inspirado, con capacidad para lograr sociedades estratégicas con la plana directiva y alinear esfuerzos hacia los objetivos y resultados esperados.

7. Cultura Organizacional.
Desarrollar una cultura organizacional alineada a las estrategias del negocio contribuye decisivamente al logro de los objetivos empresariales.

8. Vocación de servicio.
Al interior de las organizaciones, los trabajadores son sus clientes y deben sentirse satisfechos con el servicio recibido.

Fuente: pymex.pe