Se considera un Producto Mínimo Viable (PMV) al producto más pequeño que puedes construir y que crea valor al mercado tu mercado meta. Se trata sobre conversar con tus primeros clientes y comprobar si tu propuesta satisface sus necesidades o soluciona sus problemas.

Te ayuda a evaluar tus opciones, suposiciones iniciales, las cuales pueden ser muy extensas. El PMV consiste en realizar experimentos y ver qué es lo que funciona, o si no funciona y es mejor abandonar la idea.

Su objetivo es no mal gastar recursos ni energías en un producto o servicio que nadie querrá comprar o utilizar, y que pueden ser aplicados para un nuevo proyecto.

Para desarrollar un experimento de PMV primero debes identificar el perfil del cliente ideal en potencia, luego de analizarlo salir a la calle a comprobar con las personas si tu idea, proyecto, innovación es en realidad tangible para las personas o si solo es una hipótesis.

Descubrir e identificar a todos tus competidores es el próximo paso, no se trata de investigarlos, se trata de probar la calidad de su producto o servicio, una vez completada esta etapa puedes construir tu propio PMV con base en los resultados.

El paso semifinal es regresar con tus clientes potenciales y saber si están dispuestos a pagar por tu propuesta de valor, los invitas a probar tu idea que ya está realizada por lo que los clientes hacen, no lo que piensan.

El Producto Mínimo Viable es una de las bases sobre las que se sustenta la metodología Lean Startup, puedes conocer cinco conceptos para emprendedores.