73.- Kouzes y Posner en su obra ” El Desafío del Liderazgo” señalan que el conocimiento es la nueva moneda que desplazó a la tierra, al trabajo y al capital como factores de producción. Y no solo eso. El conocimiento no se hereda. Requiere del personal esfuerzo de cada uno de nosotros para adquirirlo. Y hoy en día muchas empresas se basan en el nivel de conocimiento de quienes en ellas trabajan. Me pregunto entonces y les pregunto: ¿En una empresa productora de software quienes son los dueños de los medios de producción? ¿No cambia esto las teorías que se manejaban hasta finales del Siglo XX y en especial la teoría marxista?

74.- Nos ha tocado vivir siendo bisagra entre un mundo empresarial que está dejando de ser y uno nuevo que está emergiendo en forma sostenida. Ese nuevo mundo requiere de gerentes/lideres que sean creíbles y cuiden permanentemente esa credibilidad. Que sean capaces de otear el futuro, siendo proactivos; entusiastas; enérgicos y altamente positivos. Deben saber mirar su entorno como si permanentemente dispusieran de un periscopio; tener visión que dé sentido a su diario quehacer  y compartirlo con sus equipos de trabajo. Y eso no es fácil. Exige disposición y cambio de actitud.

75.- Y en esa línea, los gerentes del siglo XXI también deben poder detectar a tiempo cuando en las organizaciones las rutinas se vuelven disfuncionales, convirtiéndose en obstáculos severos para los procesos de innovación, el advenimiento de ideas novedosas y la búsqueda de soluciones efectivas y eficientes. Entender los procedimientos como un fin y no como un medio puede paralizar una organización exitosa. Ejemplos abundan.

Econ. Rafael Peña Alvarez