Una parte importante de empresas, por no decir la mayoría, ha puesto en marcha el marketing de contenidos. Como estrategia de mercadeo el marketing de contenido también debe ser medido para saber si tiene éxito o no. El ROI (Return On Investment) es la herramienta más común para hacerlo.

Hay diversas formas para saber si el esfuerzo está valiendo la pena, las impresiones o el número de veces que se muestra una publicación en nuestra página, para que este método sea eficiente debe ser fusionado con otros para obtener un resultado correcto.

La tasa rebote es otra manera de medir, esta hace referencia al éxito o no que pueda tener un contenido cuando el usuario accede a ellos, es decir si después que hacen el clic se mantienen por un tiempo prudente dentro de la publicación o huyen con rapidez.

Al punto anterior se le adiciona la medición del scroll, es decir hasta dónde llegan los usuarios al abrir un artículo por ejemplo, ¿se quedan en las primeras líneas y se van? O ¿Llegan hasta el final de la nota? De ser positiva la primera pregunta hay que replantearse el tipo de contenido o lo atractivo del mismo.

El engagement en las redes sociales, para medir esto existen diferentes contadores. Lograr que un contenido tenga un buen alcance es lo ideal, pero no siempre sucede, o lo que es peor puede suceder porque los usuarios consideran el contenido malo y lo comparten para hacer críticas, a esto se le llama sentimiento social.

Otro punto importante es el índice de apertura de tus emails, sobre todo si estos son los de tus boletines corporativos o resúmenes de tu blog empresarial. Si son bajos los números a pesar de tus estrategias, hay que investigar qué está fallando.