Si algo se escucha en el mundo empresarial, emprendedor y de los negocios en general es “50% y 50% es lo más justo”, pero en muchas ocasiones esa afirmación es nada cierta. Lo realmente justo son aquellas sociedades en las cuales los aportes son valorados al precio del mercado y las acciones son distribuidos acorde con el valor del aporte individual.

Antes que todo debes tomar en cuenta el capital de inversión inicial del negocio incluyendo todas las necesidades a cubrir. El socio que pone el capital para los primeros gastos debe entender que este dinero pasa a ser de la empresa y no es un préstamo que se está haciendo y que le tocarán sus utilidades cuando empiece la producción, aquellos casos en los otro socio es el que pone la idea pero no dinero o trabajo debe negociar con sus socios el valor de la idea y también esperar la producción para recibir utilidades.

Ahora bien para calcular el porcentaje de acciones luego de calcular el capital inicial se debe establecer  un valor a la idea de negocios que está aportando cada socio, luego definir el puesto de cada uno incluyendo obligaciones y responsabilidades como se haría con un contratado, luego el salario asignado para cada uno.

Es recomendable hacer una proyección de flujo de caja de 1 a 5 años, escribir un acuerdo sobre cómo y cada cuánto se distribuirán las utilidades. Después definir un capital social y la cantidad de acciones que lo representan.

Hacer una adición de los aportes que cada socio está haciendo a la empresa: dinero, idea y trabajo. Se suman esos aspectos y se calcula el porcentaje. Normalmente aquel que invierte capital le toca un porcentaje mayor que aquel que trabaja, por ejemplo, todo dependerá de los acuerdos internos.