Como empresario es común que lleguen a ti diversas propuestas de negocios, muchas de ellas pueden ser interesantes y te motivan a querer dar un paso más y atreverte a aprovechar lo que consideras es una buena oportunidad.
Pero, ¿cómo saber si esa oportunidad es realmente buena? Muchos empresarios confían en su intuición y eso es totalmente válido, sin embargo hay situaciones en las cuales la sensación de que algo estará bien no es suficiente, por eso hay determinadas acciones que puedes llevar a cabo para estar más seguro de la decisión que estás por tomar.
Determina tu objetivo, ponlo por delante en tus planes y analiza si la propuesta que estás por aceptar te acerca un poco más a lograrlo, además de esto es recomendable que te realices a ti mismo una pregunta clave (esto lo puedes poner en práctica en otras situaciones) pregúntate, por ejemplo, si en un tiempo determinado te arrepentirías de no haber aceptado la propuesta.