1- Pasión por las personas:

Todo líder tiene una pasión por los otros seres humanos y por verlos crecer y desarrollarse hasta alcanzar su máximo potencial. Todo gran líder tiene un amor genuino por los otros seres humanos y siente una gran satisfacción cuando influye en el éxito de otros.

2- Pasión por los resultados:

Un gran líder no sólo ama a las personas, sino que ama a los resultados. Un buen líder comprende que si no da resultados con el tiempo perderá su liderazgo.

El liderazgo no se trata solamente de amar a las personas, sino de guiarlas y ayudarlas a llegar a un mejor lugar; lo que es igual a que den resultados positivos en su trabajo, proyecto o negocio.

Por eso los grandes líderes presionan, confrontan y retan a sus seguidores a llegar más alto de lo que ellos mismos imaginan. Los líderes aman pero no consienten. Por el contrario, porque aman, empujan y estiran a su equipo a su máximo potencial.

Los líderes odian fracasar y buscan el éxito. Por supuesto que aprenden de sus fracasos como la mejor escuela de la vida, pero rechazan permanecer ahí por mucho tiempo. Ellos tienen una pasión por el éxito y los resultados.

3- Pasión por el conocimiento:

Todo gran líder que he conocido es curioso. Ellos buscan aprender más cada día. Por eso es que todo gran líder es un gran lector. Los líderes leen, leen y leen. Nunca se cansan de aprender.

4- Pasión por la comunicación efectiva:

Los grandes líderes son grandes comunicadores. Son personas apasionadas por darse entender y comunicarse correctamente. Ellos son estudiantes eternos de la ciencia y el arte de la comunicación. Constantemente estudian a otros líderes, cómo se comunican, cuál es su lenguaje no verbal, cómo manejan la dicción, el tono de la voz, cómo escriben, etc.

Si quieres ser un gran líder necesitas aprender a ser un gran comunicador.

 

Fuente: liderazgohoy.com